Ingredientes
- 4 tomates maduros grandes
- 1 cebolla grande
- 3 dientes de ajo
- 1 pimiento verde
- 1 vaso de vino blanco
- Aceite de oliva
- 1 cayena o guindilla
- Azúcar
- Sal
Preparación de la salsa de tomate para mejillones
- Empezamos rallando los 4 tomates con un rallador para extraer todo su jugo. También podemos utilizar una lata de tomate triturado natural si lo deseamos. Reservamos.
- Pelamos los dientes de ajo y los cortamos en láminas finas. La cebolla la pelamos, la lavamos y cortamos en daditos pequeños. Lavamos también el pimiento y lo cortamos en daditos pequeños. Por último, cortamos la guindilla en varios trozos no muy pequeños y le quitamos las semillas.
- Ponemos una cacerola en el fuego con un poco de aceite de oliva. Cuando el aceite esté caliente añadimos en primer lugar el ajo, lo pochamos a fuego medio durante un minuto aproximadamente.
- A continuación añadimos la cebolla y el pimiento verde con una pizca de sal y la dejamos cocinar hasta que la cebolla esté transparente y con un tono dorado (unos 6-7 minutos). Vamos removiendo de vez en cuando.
- Cuando la cebolla y el pimiento estén pochados, añadimos la guindilla troceada y el tomate triturado con una cucharada de azúcar. Removemos bien y añadimos el vaso de vino blanco.
- Subimos un poco el fuego durante un par de minutos y después dejamos cocinar la salsa a fuego medio durante unos 10 minutos.
- Pasados los 10 minutos nuestra salsa habrá espesado. Le quitamos los trozos de guidilla si lo deseamos y ya estará lista para cubrir los mejillones. ¡Esperamos que te haya gustado!