Para empezar a preparar este plato, el primer paso es precalentar el horno a 200°C.
A continuación lava muy bien los boniatos ya que los asarás con la piel. Luego córtalo en rodajas o en tiras del mismo tamaño. Reserva.
Agrega la mantequilla a una olla pequeña y cuando ya se haya derretido añade el zumo de naranja, el zumo de limón, la miel, el azúcar, la canela y el jengibre. Mezcla con una cuchara de madera y cocina durante 8 minutos a fuego bajo. Reserva.
Engrasa una bandeja que puedas llevar al horno con aceite de oliva y extiende los boniatos en ella, que no queden montados unos sobre los otros.
Cubre los boniatos con la salsa de mantequilla que hiciste previamente y llévalos al horno por 40 minutos o hasta que estén tiernos. Cada 15 minutos saca la bandeja y báñalos con su propio jugo, así evitarás que se sequen.
Cuando ya estén blandos, tu boniato al horno con miel estará listo para acompañar las comidas de tu preferencia. También puedes disfrutarlo solo. ¡Muy buen provecho!
