Ingredientes
- 1 coliflor
- ½ limón
- 250 ml. de leche
- 100 grs. de harina
- 1 cucharada de levadura
- 1 cucharada de vino blanco
- 1 cucharada de aceite
- Sal al gusto
Preparación de la coliflor rebozada sin huevo
- Antes que nada vamos a dar un primer lavado a la coliflor. Ponla debajo del grifo y límpiala tantas veces como sea necesario. A continuación, córtala en arbolitos y lávala otra vez con agua y con el jugo del medio limón.
- Ahora en una olla vamos a poner agua abundante y sal, dejando libre un hueco por arriba para que luego no rebose. Añade las coliflores y hiérvelas hasta que estas estén tiernas, con quince minutos será suficiente. No obstante, ve comprobando de vez en cuando cómo están pinchándolas con un tenedor.
- Pon los 100 gr. de harina en un bol y, en medio, añade el aceite y el vino blanco. Mézclalo bien y añade con suavidad los 250 ml. de leche, removiendo hasta conseguir que tenga textura de pasta. Deja que repose durante unos 20 minutos aproximadamente.
- Mientras, pon en una sartén aceite de oliva a calentar. Ahora, añade la levadura a la pasta que hemos preparamos antes y ve pasando las coliflores una por una. Cuando el aceite esté caliente, ponlas a freír ligeramente hasta que estén doraditas. Con un par de minutos o tres bastará.
- Ve apartando las coliflores a un plato hondo con papel de cocina absorbente para que no queden muy grasientas. Pon a precalentar el horno a 180ºC.
- Cuando las coliflores hayan perdido todo el aceite, las pasamos a una fuente para hornear. Mételas al horno y deja que se hagan durante unos cinco minutos.
- ¡Y ya hemos terminado! ¿Ves qué fácil resulta cocinar unas ricas coliflores rebozadas, sin necesidad de añadirles huevo? Pues no dejes que se enfríen, ¡a disfrutar!