Junto con las torrijas y la leche frita, los pestiños son un dulce clásico en Semana Santa, sobretodo en Andalucía, Extremadura y Murcia. ¿Sabrías preparar unos pestiños con miel caseros?
Aunque pueden prepararse de diversas formas, la miel le da un sabor extraordinario, al igual que la matalahúva y el limón, y estos pestiños cuentan con todo eso para ser una de las mejores variantes.
Estos son los pasos que debes seguir y las cantidades que debes utilizar para conseguir unos pestiños de miel perfectos. ¡Toma nota!
Ingredientes
Preparación de pestiños con miel
- Calentamos en una sartén todo el aceite y añadimos el anís en grano y la piel de un limón. Hay que dejar que se fría todo durante dos o tres minutos y seguidamente apagamos el fuego y dejamos reposar hasta que coja temperatura ambiente.
- Es muy importante que la piel de limón que utilicemos no tenga la parte blanca porque sino amargará el postre. Asegúrate que solamente añades piel amarilla.
- Una vez el aceite está atemperado, vertemos unos 75 ml en un bol y le añadimos la harina y el vino. El resto del aceite lo reservamos. Removemos bien y cuando se haya formado una masa, apagamos el fuego y la ponemos en un superficie plana.
- Hay que estirar la masa con un rodillo y procurar dejarla bien fina porque después al freírla engordará.
- Cortaremos la masa en cuadrados de unos 5X5 centímetros mas o menos. Después cogemos las esquinas, las doblamos y las pegamos con las opuestas. Puedes utilizar un poco de agua para pegarlas si no lo consigues.
- Es el momento de freír los pestiños y lo haremos con el aceite aromatizado que tenemos reservado. Lo añadimos a la sartén y lo ponemos a calentar a fuego medio. La clave para conseguir un buen pestiño es que se fría bien, por lo que la temperatura del aceite será clave para lograrlo.
- Debemos intentar que el aceite no esté ni demasiado frío ni demasiado caliente. Por eso, probaremos con los primeros e iremos adaptando la temperatura hasta que consigamos que se no se quemen ni tampoco de queden crudos.
- Cuando estén fritos los ponemos en un plato con un papel absorbente para que expulsen todo el aceite que les sobra.
- Para darles el toque de miel, calentaremos la miel en un cazo con medio vasito de agua aproximadamente. El agua tiene que equivaler a un cuarto del volumen de miel que tenemos en el cazo.
- Una vez la miel está caliente, vamos introduciendo los pestiños y los bañamos en el almíbar de miel y los sacamos. Habría que ponerlos en una rejilla para que escurran la miel que le sobra y solidifiquen.
- Terminado este paso ya tendrías listos tus pestiños de miel. Ahora solo queda disfrutar de este dulce y de la Semana Santa.