Calentamos en una sartén todo el aceite y añadimos el anís en grano y la piel de un limón. Hay que dejar que se fría todo durante dos o tres minutos y seguidamente apagamos el fuego y dejamos reposar hasta que coja temperatura ambiente.
Es muy importante que la piel de limón que utilicemos no tenga la parte blanca porque sino amargará el postre. Asegúrate que solamente añades piel amarilla.
Una vez el aceite está atemperado, vertemos unos 75 ml en un bol y le añadimos la harina y el vino. El resto del aceite lo reservamos. Removemos bien y cuando se haya formado una masa, apagamos el fuego y la ponemos en un superficie plana.
Hay que estirar la masa con un rodillo y procurar dejarla bien fina porque después al freírla engordará.
Cortaremos la masa en cuadrados de unos 5X5 centímetros mas o menos. Después cogemos las esquinas, las doblamos y las pegamos con las opuestas. Puedes utilizar un poco de agua para pegarlas si no lo consigues.
Es el momento de freír los pestiños y lo haremos con el aceite aromatizado que tenemos reservado. Lo añadimos a la sartén y lo ponemos a calentar a fuego medio. La clave para conseguir un buen pestiño es que se fría bien, por lo que la temperatura del aceite será clave para lograrlo.
Debemos intentar que el aceite no esté ni demasiado frío ni demasiado caliente. Por eso, probaremos con los primeros e iremos adaptando la temperatura hasta que consigamos que se no se quemen ni tampoco de queden crudos.
Cuando estén fritos los ponemos en un plato con un papel absorbente para que expulsen todo el aceite que les sobra.
Para darles el toque de miel, calentaremos la miel en un cazo con medio vasito de agua aproximadamente. El agua tiene que equivaler a un cuarto del volumen de miel que tenemos en el cazo.
Una vez la miel está caliente, vamos introduciendo los pestiños y los bañamos en el almíbar de miel y los sacamos. Habría que ponerlos en una rejilla para que escurran la miel que le sobra y solidifiquen.
Terminado este paso ya tendrías listos tus pestiños de miel. Ahora solo queda disfrutar de este dulce y de la Semana Santa.