No te pierdas esta estupenda receta de galletas de almendra sin azúcar que te proponemos a continuación en Unareceta.com. Las tendrás listas en tan solo un rato y su dulce y suave sabor te conquistará.
Si te gusta mucho el dulce pero no puedes comer azúcar, puedes probar a preparar cualquiera de las muchas recetas de las que disponibles. Por ejemplo, puedes hacer un exquisita coca de San Juan sin azúcar, un delicioso pastel de zanahoria sin azúcar o un dulce de leche sin azúcar.
¿Te atreves a preparar hoy con nosotros estas galletas de almendra sin azúcar? Nosotros ya estamos listos, ¿y tú? ¡Pues empecemos!
Ingredientes necesarios:
Preparación de las galletas de almendra sin azúcar
- Lo primero que vamos a hacer para cocinar estas deliciosas galletas es separar las claras de las yemas. Cuando lo hayas hecho, monta las claras a punto de nieve y aparta las yemas, las usaremos después.
- Ralla el limón y, en cuanto lo tengas, añádelo a las claras montadas junto con la canela. Si quieres, también puedes añadir un poco de edulcorante.
- Mézclalo todo bien con ayuda de unas varillas, de forma suave y sin batir. A continuación, añade la almendra molida y sigue mezclando suavemente.
- Pon a precalentar el horno a 190ºC para que vaya cogiendo temperatura mientras terminamos de hacer la masa. Asimismo, pon en la bandeja del horno papel vegetal porque vamos a poner sobre él las galletas así que, vamos a darles forma.
- Coge un puñado de masa y haz con él una bola. A continuación, ponla sobre la bandeja y aplástala con la palma de la mano. Repite el proceso hasta que hayas terminado con toda la masa.
- Cuando tengas todas las galletas, coloca sobre sobre cada una de ellas una almendra y coge las yemas que hemos apartado antes. Lo que tiene que hacer es batirlas y con la mezcla que obtengas, pintar las galletas. Para ello, utiliza un pincel de silicona. De este modo sellaremos las almendras, y además nuestras galletas tendrán un color dorado muy apetecible.
- Mete ahora la bandeja en el horno durante unos veinte minutos y, cuando al fin estén bien doraditas, apaga el horno, saca las galletas y deja que se enfríen. ¡Verás lo ricas que te han quedado! ¡Muy buen provecho!