Antes de comenzar, corta las bases de las peras y pélalas, no les quites el tallo. Luego haz tres cortes verticales uno al lado del otro pero sin llegar hasta abajo, solo hasta la mitad.
Vierte el vino tinto en una olla y añade cuatro cucharadas de azúcar, los clavos y la corteza de naranja, mezcla para unir y lleva al fuego. Cuando rompa a hervir incorpora las peras y hiérvelas hasta que se ablanden, con treinta minutos será suficiente.
Cuando ya las peras estén tiernas vas a preparar el glaseado. Derrite la mantequilla en una sartén a fuego bajo y agrega la miel, una cucharada de azúcar y la canela.
A continuación, saltea durante unos minutos y luego incorpora las peras, añade una taza del vino en el que se cocinaron y deja reducir durante cinco minutos. Flambea con un poco de Cointreau y aparta del fuego. Si quieres más almíbar, agrega más vino.
Puedes servir tus peras al vino tinto con miel calientes y acompañarlas con helado. ¡Frías también son deliciosas! ¡Qué aproveche!