Empieza por escurrir el atún y reservar tanto el aceite como el agua. Luego colócalo en un bol y desmenúzalo con un tenedor.
Después, añade el queso Philadelphia que debe estar a temperatura ambiente, el zumo de limón, el aceite de oliva, el agua del atún, salpimienta y tritura con ayuda de una batidora.
Una vez que tengas una pasta homogénea, colócala en un recipiente preferiblemente de vidrio y refrigérala durante media hora.
Cuando el paté haya cogido cuerpo ya estará listo para untarlo sobre pan tostado o unas galletas.
A continuación, pica el cebollino o el perejil, espolvoréalo por encima y dale así a tu paté de atún un toque de color adicional. Esperamos que lo disfrutes. ¡Es muy fácil de hacer y además está buenísimo!